Año Nuevo, vida nueva y... ¡post nuevo! No podía comenzar otro curso blogosférico sin hacer un repaso a las mejores lecturas que me dejó 2016, un año en que cayeron pocos libros pero algunos inolvidables. No van a encontrar aquí las últimas novedades del momento ni los libros más populares, simplemente las lecturas con las que más disfruté en los últimos 12 meses, un periodo en el que, por cuestiones varias, mis ganas de abrazar nuevas historias se vieron reducidas drásticamente...
Antes de ir al grano, les dejo con el resumen general de 2016 que me regaló Goodreads; ¿qué les parece?
Como ven, 2016 estuvo marcado por libros cortitos, muchos ilustrados y lecturas que han ido desde el best seller de la década hasta títulos más desconocidos e independientes... Aquí les dejo el enlace en el que podrán cotillear, si les apetece, en todas mis lecturas del año, dónde podrán ver, no sólo lo mejor (que es lo que hoy celebro), sino también los que no deben ser nombrados, esos libros que prefiero no recordar...
Lo mejor de 2016.
Yo antes de ti.
Me acerqué a este libro sin más expectativa que pasar un rato agradable de lectura... Y acabé tocada y hundida. Si me afectó tanto no fue por una historia de amor más o menos clásica que estaba dentro de lo esperable, ni por un tema controvertido de fondo, ni por un final polémico que hizo que mucha gente defenestrara esta novela, sino por su protagonista, Louisa Clark: hacía mucho tiempo que no me encontraba en literatura a una chica tan real, tan cercana a mis propios problemas cotidianos, con la que me sintiera tan identificada. Sé que el personaje le resulta cargante a muchos pero para mí su personalidad y su evolución han sido de las cosas más bonitas de leer con las que me encontré en 2016. Por favor, no subestimen este libro por su título, portada o película y háganle hueco en su estantería si aún no lo han hecho: Louisa Clark está hecha para conquistar muchos corazones. Aquí les dejo mi opinión vía podcastde esta historia sin igual.
Retratos gatunos.
Un breve libro ilustrado que disfruté en un suspiro y que me enamoró totalmente: las ilustraciones son maravillosas, los pequeños poemas que lo componen, curiosísimos, y la temática de gatos simplemente genial. El regalo perfecto para cualquier amante de los mininos, de los buenos dibujos y de los libros como objeto de colección.
Ritos funerarios.
Leí Ritos funerarios hace ya varios meses... Y me llegó tanto que aún no he sido capaz de escribir sobre él. Una historia ambientada en la Islandia decimonónica y cuyo conflicto central es el alojamiento temporal en la casa de unos campesinos de una rea condenada a muerte por asesinato no parece ser la historia más apasionante del mundo... Pero la construcción de los personajes, la exquisita narración y una documentación que se nota bien trabajada hicieron de la lectura de esta novela una de las mejores experiencias del año. No dejen pasar esta discreta historia con un valor inconmensurable.
Instrumental.
Había oído hablar de esta novela a algunos blogueros de confianza y no pude dejarla pasar cuando me la tropecé en la librería durante una calurosa tarde de verano. Aunque me esperaba la dureza de la historia, nunca hubiera imaginado la magnitud de los hechos que cuenta Rhodes y el tono tan brutalmente honesto que utiliza para hablar de los episodios más dolorosos de su vida, esas violaciones que sufrió de niño y que lo marcaron para siempre. Entre las memorias, la denuncia y la declaración de amor a la música como vía de sanación, Instrumental nos ofrece esperanza en medio de la desolación, una luz al final del túnel. Un libro que trasciende, que no pasa sin pena ni gloria.
La casa de Bernarda Alba.
Tantos años defenestrando a Lorca, diciendo que sus letras no eran para mí y, después de llegar a esta obra por una razón estúpida me doy cuenta de que vaya, este hombre era un genio. La casa de Bernarda Albaha sido probablemente el libro que más me ha sorprendido este año: a pesar de ser un clásico incuestionable en nuestro país nunca me obligaron a leerlo y nunca vi una representación teatral de esta obra, pero aún así, tenía la idea preconcebida de que iba a ser un coñazo. Sin embargo, una vez leído, me pareció un texto de enorme calidad y simbolismo y con un mensaje tan rabiosamente actual (la represión de la mujer) que parece hasta premonitorio. Una maravilla de obra de teatro que no me cansaré de recomendar; ¡ahora sólo me falta verla en vivo y en directo!
Americanah.
Tenía este libro en mi lista de deseos prácticamente desde que salío publicado en España y, de hecho, no tardé demasiado en hacerme con su edición digital... Pero el tiempo fue pasando y otros libros se interpusieron antes, con mayor o menor fortuna. Sin embargo, una video reseña lo rescató del olvido en el que lo tenía abandonado y no tardé en ponerme con él: como resultado me estuve maldiciendo varios días por no haber comenzado esta historia antes. Americanah narra la historia de Ifemelu, una joven nigeriana que tiene que dejar su país para estudiar en Estados Unidos y, años después, se plantea volver: nos va narrando episodios de su juventud en Nigeria, del cambio tan brutal que experimenta al trasladarse a Estados Unidos, del racismo, del machismo, de política y de un montón de temas más que su autora va trenzando con un ritmo y una calidad excelentes. Una historia buenísima narrada con maestría que, les aseguro, merece mucho la pena conocer.
Pues, ¡hasta aquí mi lista de lo mejor del año! Al final han sido seis los elegidos aunque podían haber sido algunos más, sin embargo estos me han parecido los más representativos de los últimos 12 meses.
¿Has leído alguno de mis favoritos? ¿Qué te han parecido? ¿Cuáles fueron tus mejores lecturas en 2016?
¡Mis mejores deseos para el año que empieza, un abrazote! :)